domingo, 27 de enero de 2013

Mi autoestima y yo

...Busco sin cesar en todos los rincones de mi casa, pero no consigo encontrarla. He empezado a ponerme nerviosa porque llega la hora de irme y necesito mi dosis diaria de autoestima, no tengo fuerzas para salir a la calle sin ella, no podré enfrentarme en el trabajo a cientos de personas sin mi dosis de confianza, la cual me inspira seguridad y felicidad. ¿Y si se hubiera ido? ¿así sin decirme nada?¿qué será de mí?. Cuando conocí a mi autoestima yo era una persona triste, tímida, retraída, llena de miedos... gracias a ella he conseguido poco a poco salir de mi crisálida y volverme la persona que soy hoy. Quizás se ha ido por que ya no la necesito, o bien porque ella ya no se considera útil. Quizás se ha ido porque alguien la necesita más que yo. Pero aún así tengo miedo...
Bueno, no me queda otra, tendré que echar el resto y salir a esa jungla, hacer caso a los consejos que me dio, levantar la cabeza, sonreír y recordar que el resto de la gente que me ve tiene el mismo miedo que yo o incluso más. Abro la puerta, respiro hondo, miro al frente y me digo a mi misma que puedo hacerlo, ella me enseñó y yo siempre fui una buena estudiante, es hora de demostrarlo..

Sin dinero no hay entierro

-¡Niñaaa, corre, llama al 112, que creo que la abuela se ha muerto!...
-¡Ay, abuela, ahora no, no te mueras, que no podemos pagarte el entierro, vuelve, vuelve abuela!
Pero no, la abuela no volvió y efectivamente se murió. Cuando llegaron los del 112 ya no había nada que hacer y lo único que hiceron fué certificar su muerte pero con el jaleo no nos dieron el papelito con el certificado de defunción. Cuando se fueron ellos, llegó la policía y como no teníamos el dichoso papelito, nos obligó a desalojar la casa y esperar a que llegara un juez que lo certificara y mientras no pudimos ni velarla. ¡Pensé que a mi madre le daba un síncope y en vez de una muerta, tendríamos dos!. Unas vecinas nos recogieron y nos dejaron hacer las gestiones con los servicios sociales para ver como podíamos hacer para que la enterraran porque tristemente no disponíamos de dinero ni para eso. Mientras mi pobre abuela seguía allí en su camita, como dormida pero solita, sin nadie a su lado por culpa de un pequeño trámite burocrático y por un exceso de celo de la policía.
Naturalmente coincidiendo que era fin de semana hubo problemas para encontrar a un juez, y los servicios sociales dijeron que como mínimo hasta el lunes no se podría hacer nada. La metieron en una cámara hasta que se realizasen los trámites.¡pobre Abu, con lo friolera que fue ella siempre y ahora metidita en una nevera!. Finalmente conseguimos, ese lunes, que la sacaran de la nevera y la enterrarán en una fosa común, donde junto con otros ocho desconocidos compartirá su viaje a la eternidad. El único consuelo que nos queda a mi madre y a mi, es que al menos no estará sóla y con lo que le gustaba hablar, a mi abuela, seguro que les tiene a sus compañeros de tumba muy, pero que muy entretenidos con sus historias. ¡buen viaje Abu, te echaré de menos!...

Esclavas sexuales

...Algunas personas ilusas piensan que la esclavitud no existe hoy en día en España y yo les digo que eso no es cierto, yo misma he sido una exclava sexual. Siendo una joven e inexperta chica guapa, desde mi país me convencieron para venir a España con la mentira de conseguir un buen contrato de modelo, y tonta de mí yo me lo creí. En mi país las cosas iban mal, no había trabajo y mis padres no podían mantenerme por mucho más tiempo, así que pensé que era el momento justo y que si no cogía ese trabajo lo mismo me arrepentiría y efectivamente me he arrepentido, ¡pero de venir aquí!. Nada más llegar me quitaron el pasaporte y me metieron un un burdel del cual no salí ni un solo día durante dos años. Intenté escapar dos veces, pero sin éxito. La primera vez me dieron una paliza que me tuvo dos semanas en cama y pensé que me moría y la segunda no me hicieron nada solo me tuvieron incomunicada unos días, tras los cuales, me enseñaron un periódico de mi ciudad natal donde salía una foto de mi padre junto a una noticia en la que ponía, "Un hombre recibe una brutal paliza para robarle" también se decía que estaba vivo pero en estado crítico.No hizo falta que me dijeran que habían sido ellos y que eso solo era un aviso. Cuando ya pensaba que lo mejor era acabar con mi vida, conocí a un hombre que se apiadó de mí y gracias al cual conseguí salir de allí. Era un camionero que frecuentaba el local y al que poco a poco comencé a tener casi como cliente en exclusiva porque el pagaba un suplemento para que nadie más se me acercara. Yo finalmente he conseguido pagar mi deuda y salir de aquel suplicio con la ayuda y el dinero de ese hombre, ahora he vuelto a mi país con mi familia, pero mis compañeras se quedaron allí...¡quien diga que no ha esclavitud en España no sabe lo que dice!

miércoles, 16 de enero de 2013

Niños robados

..Iba sentada en el metro cuando levanté la mirada y me fije en la chica sentada en frente de mi, de repente un escalofrío recorrió mi espalda y mi corazón dejo de latir por un momento, esa chica era igual que yo, era como verme a mi misma en un espejo, éramos como dos gotas de agua ¿como era posible?. De repente, supongo que al sentir que yo la miraba, ella también levantó sus ojos del libro que llevaba y me miró. Su cara reflejó la misma expresión de terror que probablemente había reflejado la mía instantes antes. Durante unos segundos no pudimos dejar de contemplarnos mutuamente en silencio. Finalmente yo rompí el hielo, como había un asiento libre a su lado, me levanté del mío y me senté junto a ella y le dije. ¡Perdona!¿Puedo hacerte una pregunta?. ¡Si claro dijo ella!. ¡Dios, hasta el tono de su voz era parecido al mío!. ¿Has notado que eres igualita a mi? ¡Si, la verdad es que estoy alucinada, imagino que igual que tú!. comentó. ¿Por casualidad no serás adoptada, verdad? .¡Pues sí! ¿no me digas que tú también?.¡Si, yo también!.le respondí, luego me quedé un segundo pensativa y le pregunté ¿tienes prisa o tienes tiempo para tomar un café y hablamos?. Nos bajamos en la siguiente parada y salimos a la calle en busca de una cafetería, aquella tarde nos tomamos como tres cafés y nos contamos nuestra vida y llegamos a la deducción de que podíamos ser hermanas gemelas, misma fecha de nacimiento, misma ciudad, mismos rasgos, mismo grupo sanguíneo raro, quizás nos dieron en adopción nada más nacer a padres diferentes....Desde aquel día y tras indagar mucho conseguimos descubrir que nosotras también fuimos "niñas robadas"... Quizás algún día se haga justicia, mientras, seguimos buscando a nuestra verdadera madre y aunque eso no quita nuestro amor por nuestros padres, creemos necesario conocer a aquella persona que quizás se ha pasado media vida suspirando por dos niñas a las que jamás vio crecer....¡no es justo!

lunes, 14 de enero de 2013

La terraza

...Hacía muchos años que no sentía el aire rozando mis mejillas y al sol rodeando mi frágil cuerpo, con su cálido aliento. Era la primera vez que salía al aire libre desde mi accidente en moto, por el cual quedé tetrapléjica. Tras muchos años de trabajo y de ahorro finalmente mis padres habían conseguido vender nuestro piso, que era un cuarto sin ascensor, y trasladarnos a un bajo con una gran terraza. Hicieron obras para unir mi habitación con la terraza mediante una gran puerta corredera, y así por fin, se pudo sacar mi cama a la terraza y yo volví a ver el cielo y los pájaros sobrevolando mi cabeza, pude oler los árboles, pude oír las risas de los niños de un parque cercano, el ladrido de un perro... tantos sonidos, tantas sensaciones. Mi madre me agarró fuertemente la mano, con expresión preocupada, cuando vio que una lágrima caía de mis ojos. ¡Tranquila mama, lloro, pero de felicidad! pensé que en el fondo con que pocas cosas puede uno ser feliz, solo hace falta no poder tenerlo para apreciarlo...

miércoles, 9 de enero de 2013

Dos en la carretera

... El joven policía miraba por la ventana del coche patrulla cuando de repente se giró hacia su compañero y le dijo.¡Mira Miguel! es la segunda vez que pasamos por delante de esa parada de autobús y esa pareja de ancianos sigue ahí sentada con el frío que hace. Hoy es Navidad y a esta hora ya no hay servicio de autobuses vamos a acercarnos y se lo comentamos. Además es difícil encontrar un taxi a estas horas y en una noche como esta. Pararon el coche junto a ellos y les explicaron que no había autobuses y que tendrían que llamar a un taxi. ¡Gracias joven! Pero no tenemos dinero y tampoco tenemos móvil, pero no se preocupe... ¿Donde van a estas horas? Hace frío y su mujer tiene mal aspecto. ¿Quieren que llamemos a algún familiar? ¡Verá, es que nuestros hijos nos han echado de casa y no tenemos donde ir! No sabemos que hacer...¿Nos podría dar algo para comer un bocadillo?. Pero esta noche es Navidad, ¿porqué les han echado? La anciana, que había permanecido callada todo el rato, habló para decir que su hija y su yerno tenían invitados para cenar y que ellos no eran bien vistos, querían que no salieran de su habitación y que no hicieran ruido, ni salieran al baño y habían discutido. El final de la discusión habían concluido con dos maletas y la puerta de la calle a sus espaldas. ¡Esperen un momento que voy a hablar con la central! Dijo el policía de mayor edad. Mientras se acercaban al coche comentaban entre ellos.¡impresionante tío y en Navidad!. Vamos a llevarles a algún albergue y daremos parte a los servicios sociales. Yo no aguanto a mis suegros pero me sentiría incapaz de dejarles en la calle tirados como perros. ¿Es que hemos perdido la humanidad?...este trabajo a veces me deja perplejo, la realidad supera con creces a la ficción...